J. Sierra, Valencia
Expertos del
Museo de Historia Natural de
Leiden, en
Holanda, han anunciado que el próximo 1 de agosto realizaran una necropsia a un ejemplar de
buitre leonado encontrado el pasado 13 de julio en
Wieringermeer. Al parecer, y según las citadas fuentes, el ejemplar de buitre leonado estaba anillado en
Valencia, lo que confiere un carácter extraordinario a esta cita, según adelantó ayer
Javier Armero, de la
Societat Valenciana d'Ornitología (SVO)
El buitre fue encontrado muerto en un campo de
Wieringermeer, Holanda, el 13 de julio de 2008. Según fuentes citadas por la
agencia Efe, este ejemplar tenía una anilla en una de sus patas, y se cree que podría haber sido anillado en
Valencia en el año 2006. Los especialistas piensan que el buitre podría haber llegado a
Holanda en busca de comida y que, ante la falta de ésta, podría haber muerto por inanición.
Javier Armero aseguró ayer que el ejemplar que aparece en la imagen no tiene aún plumaje adulto, "pero tampoco es un pollo".
"Lo llamativo de la noticia, además de la distancia que pueda haber desde la
Comunitat Valenciana hasta
Holanda, es que haya aparecido en este país, que no tiene condiciones para la supervivencia del buitre y en el que la colonia más cercana está en el
Pirineo francés. Se trata en todo caso de un desplazamiento extraordinario y del que no tienen que existir muchos antecedentes", explicó.
Una vez realizada la necropsia, la anilla será remitida a la
Oficina Central de Anillamiento Europea, que a su vez la enviará al
ministerio de Medio Ambiente, donde se custodia el registro de datos nacional.
En un proceso "un poco lento" afirma
Armero, pero que puede contribuir a buscar un perfil al ejemplar fallecido y saber si antes pasó por otras lugares en los que quedó registrado por su anilla.
Javier Armero recordó que hasta hace poco la
Comunitat tenía una importante colonia de
buitres leonados que no había parado de crecer hacia el sur y hacia el interior desde las
sierras castellonenses. Sin embargo, apunta, la práctica desaparición de los muladares como consecuencia del control de enfermedades como la de las vacas locas y la proliferación de
parques eólicos en Castelló, que cortan el flujo natural entre
Teruel y las colonias castellonenses de la especia pueden hacer que entre de nuevo en regresión.
Foto de
Ximo Seguí,
FONS FOTOGRÀFIC SVO.
