SVO EN PRENSA; AVES ESTEPARIAS.

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Especies

Las aves esteparias recuperan sus hábitats históricos en la Comunitat

Reaparecen algunas especies que habían desaparecido gracias a un Plan de Acción

Alcaraván común (Burhinus oedicnemus)

18.04.08 -

Jorge García-Lliberós

Las aves esteparias aumentan su presencia en la Comunitat Valenciana. En el pasado, la transformación de las escasas extensiones de estepa del territorio valenciano provocó la huida masiva de estas especies, llegando algunas a desaparecer. En la actualidad el Plan de Acción de Aves Esteparias está contribuyendo al retorno de estas aves peculiares. El cernícalo primilla, en peligro de extinción en Valencia, está respondiendo satisfactoriamente al programa de cría en cautividad, que ha propiciado reintroducciones periódicas. Las autoridades y los grupos conservacionistas hacen fuerza para preservar estas especies altamente valoradas por su escasez en la Comunitat.

Las aves esteparias tienen en común su vinculación a un hábitat específico, las llanuras de interior con vegetación escasa o de baja altura, en cuyos suelos nidifican. Este tipo de entorno de apariencia semiárida predomina en la meseta central de la Península, siendo más escaso en las regiones levantinas. En la Comunitat, las estepas que se conservan se concentran principalmente en el área suroeste de la provincia de Valencia y noroeste de la de Alicante, zonas dedicadas al cultivo de cereales. Algunas de estas áreas de extensión importante han logrado sobrevivir, pero muchas de ellas son en la actualidad meros reductos de poca extensión que han perdido gran parte de sus valores naturales. La regresión de estos ambientes en la Comunitat se debe a los cambios en el uso del suelo efectuados por el hombre.

La transformación de los sistemas agrícolas tradicionales en cultivos intensivos, arbolados y de regadío, así como el progresivo abandono de la ganadería que facilita el aumento de la cubierta vegetal en los espacios abiertos, han conducido a la desaparición de una parte importante de las antaño más abundantes estepas, tanto de las naturales como de las cerealistas. Con tales cambios se ha reducido de forma significativa el hábitat adecuado para las especies esteparias que habitaban estas zonas. Allí se concentraban las precarias poblaciones valencianas de cernícalo primilla, avutarda, sisón, ganga ortega y ganga ibérica, todas ellas consideradas al borde de la extinción, aunque con recientes indicios de poder recuperarse si se actúa a favor de la conservación de sus hábitats.

A salvo de esta situación de seria amenaza se encuentra el alcaraván, el ave esteparia más abundante en el territorio valenciano. "Es la especie menos exigente en cuanto a las condiciones del hábitat y además tiene hábitos nocturnos, lo que favorece su supervivencia", afirma el Presidente de la Societat Valenciana d'Ornitologia, Pedro del Baño. Este destaca que muchas de las aves esteparias crían en otras zonas más interiores de la península ibérica y vienen a hibernar a zonas del este, por lo que durante invierno se pueden avistar más ejemplares. Sin embargo no siempre resulta fácil detectarlos debido a su plumaje críptico, que les permite mimetizarse con los colores del suelo y el entorno. Este es el rasgo más característico y curioso de las aves esteparias, y es especialmente acentuado en el caso de la ganga común y la ganga ortega, las cuales utilizan esta facultad como mecanismo de autodefensa.

El Plan de Acción

Estas dos especies sufrieron una drástica regresión en los años 90 en la Comunitat Valenciana, pero en la actualidad dan muestras de recuperación. Así, en el último año la población de ganga ibérica se ha triplicado y ha pasado de 12 parejas a 30 y la población de Ganga ortega de 120 parejas a 145. Por su parte, la avutarda, el ave voladora más pesada de Europa, se mantiene desde que fue redescubierta en territorio valenciano en 2004 después de unas décadas considera extinta. Su hermano pequeño, el sisón común, también ha visto incrementada su población hasta las 23 parejas actuales. Las lluvias del pasado año aumentaron el territorio donde se localiza ésta ave, que se ha incrementado en el Valle de los Alorines, Villena, por tercer año consecutivo. Pero sin duda, la recuperación más espectacular la ha protagonizado el Cernícalo Primilla. El Plan de Acción de Aves Esteparias impulsado por la Generalitat Valenciana esta favoreciendo el retorno de todas estas aves pero ha centrado su acciones en el cernícalo.

Esta especie se extinguió en las décadas de los 70 y 80 por la conversión de cultivos de secano en regadíos. Según explica Pedro del Baño, se trata de una pequeña ave rapaz más propia de ambientes urbanos, por lo que, a diferencia de las aves esteparias, es habitual encontrar sus nidos en tejados y torres. Sin embargo, a lo largo del tiempo ha colonizado las llanuras de interior y por ello se incluye en el Plan de Acción para la Conservación de las Aves de las Estepas Cerealistas de la Comunitat Valenciana, nombre que recibe el programa de actuaciones decretado por la Conselleria de Medio Ambiente en 2005. Este contempla para el cernícalo primilla la continuación de un programa de cría en cautividad que ha ayudado a que, partiendo de la extinción, esta ave alcance en la actualidad las 57 parejas reproductoras y 136 pollos volanderos. Desde Medio Ambiente se hace hincapié en el éxito del plan, que ha permitido que las esteparias aumenten su población y su área de reproducción en la Comunitat.

Además de la cría en cautividad, el Plan de Acción de Aves Esteparias contempla un elenco de acciones de conservación para el cernícalo primilla y las demás aves esteparias. Así, se están ejecutando labores de seguimiento de las poblaciones y de control de amenazas potenciales, como son los tendidos eléctricos. Los técnicos han construido nidos artificiales para el cernícalo. Además se están fomentando las prácticas agrícolas y ganaderas compatibles con este tipo de aves. De hecho se han negociado acuerdos con propietarios de terrenos que han llevado al establecimiento de reservas de fauna. En este sentido, actualmente se está tramitando la declaración de las zonas esteparias como Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA). Finalmente, para concienciar a la gente de la importancia de conservar a estas especies, desde el Plan de Aves Esteparias y en colaboración con las corporaciones locales se llevan a cabo acciones de educación ambiental.




Foto de Ximo Seguí, FONS FOTOGRÀFIC SVO.
Noticia publicada en LAS PROVINCIAS 18.04.08.